Según Shopenhauer, el hombre es una criatura asquerosa. Desear la inmortalidad del hombre es desear la perpetuación de un gran error. ¿Cómo puede ser que el hombre sea corrupto, torturador, asesino, que organice guerras, genocidios? Porque la inteligencia nos da la capacidad de hacer daño. Según Shopenhauer, los animales no son crueles en sí mismos, pero el hombre sí, porque hay que ser inteligentes para querer hacer daño. Él decía que lo único que existe en el mundo son los deseos. Por ejemplo, deseamos a una persona o una cosa y cuando nos cansamos, queremos otra. ¿Por qué pasa eso? ¿A qué consecuencias nos lleva que nuestros deseos no lleguen a satisfacerse nunca? Frustración, sufrimiento... Shopenhauer consideraba que la vida es esencialmente sufrimiento. Shopenhauer decía que los humanos son como puercoespines: cuando hace frío, se juntan para darse calor, pero si se juntan demasiado, se pinchan y entonces tienen que guardar las distancias.
Para Shopenhauer, la única manera de combatir el deseo era optar por la nada. La nada es el vacío, la ausencia de deseo. Para él era la única vía para luchar contra el sufrimiento. Creía que para lograr la felicidad se debía de renunciar a todo tipo de deseo.
Shopenhauer creía que para evitar el sufrimiento había que renunciar a los deseos. Pero, ¿cómo podemos hacerlo? Siempre deseamos algo.
Hay que evitar el pesimismo de Shopenhauer. ¿Por qué siempre que conseguimos lo que deseamos pasamos a desear otra cosa? ¿Y si no tenemos deseos? Shopenhauer decía que era la única salida al sufrimiento. Pero si no tienes deseos también sufres, te ves apartado. Todos sonríen, saben lo que quieren...
¿Y si no sabes lo que quieres? ¿Y si te despiertas y no quieres levantarte?
A los que les pasa esto deberían escuchar al maestro de los peripatéticos, a Aristóteles, que decía que "la esperanza es el sueño de los despiertos".
Merlinadas
-"¿Cómo se dice en filosofía que todo va mal?"
-"Egocentrismo adolescente recalcitrante.: edad del pavo".
-"Cuando estás enamorado aceptas las diferencias del otro".
-"Tienes tempo de mujer, es decir, ya no eres una niña".
"Eres una niña pequeña que intenta llamar la atención. Alguien te hace daño y tú callas".
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